Incluso en las situaciones más difíciles siempre tenemos esperanzas que nos hacen levantarnos y seguir adelante. No importa que esperanza sea, si se cumple o no, sólo importa el hecho de tener un motivo más para vivir. Toda nuestra vida se rige de esperanzas e ilusiones, la mayoría nunca se cumplen pero siempre hacemos todo lo que podemos (o queremos) para que se realicen. En el momento en el que nos damos cuenta de nuestro fracaso, tratamos de no desanimarnos apoyándonos en nuestros pilares, esos pilares que no dudan en darte abrazos si los necesitas, y es que, no hay forma más fructífera de animar a alguien que un abrazo. Puedo sentirme afortunada de haber recibido y dado miles de abrazos, y aunque el tiempo pase y el mundo cambie, puedo estar segura de que siempre tendré gente a mi lado para recibirme con los brazos abiertos.
"La soledad se descubre a menudo en la necesidad de un abrazo"
"La soledad se descubre a menudo en la necesidad de un abrazo"
1 comentario:
Los abrazos hacen mundo. Y siempre nos quedara un beso en Paris.
Un Saludo
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